El cierre de Télam, la agencia de noticias de Argentina, fue anunciado por el presidente Javier Milei el pasado viernes 1 de marzo de 2024, en su discurso ante la Asamblea Legislativa. El mandatario argumentó que la agencia había sido utilizada como una “agencia de propaganda kirchnerista” y que su gestión iba a “cerrar la agencia Télam” en la misma línea que el INADI, que también fue eliminado por su gobierno.
La decisión generó una fuerte reacción de los trabajadores de Télam, que convocaron a un abrazo simbólico a la sede de la agencia en Bolívar 531, este lunes a las 12.30. Sin embargo, durante la noche del domingo, la policía porteña valló los dos edificios de Télam en la Ciudad de Buenos Aires, impidiendo el acceso al personal y al público . Además, la web de la agencia fue deshabilitada y mostraba un error con el escudo nacional y la frase: “Página en reconstrucción” .
El cierre de Télam no solo afecta a los más de 500 trabajadores que pueden quedar sin trabajo, sino también al derecho a la información de los ciudadanos y al pluralismo informativo. Télam era la única agencia pública de noticias del país, fundada en 1945, y tenía una amplia cobertura nacional e internacional, con corresponsales en distintas partes del mundo. Su función era brindar información veraz, objetiva y plural a los medios de comunicación, organismos públicos y privados y al público en general.
El tipo de periodismo que realizaba Télam era informativo, con un enfoque social y cultural, que buscaba reflejar la realidad del país y del mundo desde una perspectiva amplia y diversa. La agencia producía noticias, reportajes, entrevistas, análisis, fotografías, videos y audios sobre temas políticos, económicos, sociales, culturales, deportivos, científicos y educativos. Además, tenía una sección especializada en derechos humanos y memoria.
El cierre de Télam tendrá un impacto negativo en el ámbito informativo nacional e internacional, ya que se perderá una fuente de información pública, independiente y de calidad, que contribuía al debate democrático y a la formación de opinión pública. Asimismo, se afectará la libertad de expresión y el derecho a la comunicación de los trabajadores de la agencia, que ven vulnerados sus derechos laborales y profesionales. Por último, se debilitará el rol del Estado como garante del acceso a la información y del fomento a la diversidad y el pluralismo mediático.
Y que dice la Oposición a todo esto!!
La oposición al gobierno de Milei expresó su repudio al cierre de Télam y lo calificó como un ataque a la libertad de expresión y a la democracia. Diversos partidos políticos, organizaciones sindicales, medios periodísticos y sociales manifestaron su solidaridad con los trabajadores de la agencia y reclamaron la continuidad del servicio público de noticias. Además, señalaron que para cerrar Télam se debe sancionar una ley y no bastan las decisiones unilaterales del Ejecutivo .
El sindicato de prensa también se pronunció contra el cierre de Télam y lo consideró como una medida “arbitraria” e “ilegítima”. El Sindicato de Trabajadores de Prensa (Sitrapren) afirmó que “Télam es vital en el fortalecimiento de la soberanía informativa” y que “su cierre sería un ataque a todo el sistema de medios”. El Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba) se sumó al rechazo y ratificó su “compromiso en la defensa de los trabajadores y del rol social” que cumple la agencia .
Los trabajadores de Télam anunciaron que tomarán medidas para resistir el cierre de la agencia y defender sus puestos de trabajo. Entre las acciones previstas se encuentran movilizaciones, asambleas permanentes, presentaciones judiciales y campañas mediáticas. Los trabajadores también solicitaron el apoyo de la sociedad civil, de los medios de comunicación y de los organismos internacionales de derechos humanos para frenar el avasallamiento del gobierno de Milei.